Durante 2025 se ha registrado un repunte del interés de inversionistas extranjeros por el mercado inmobiliario chileno, especialmente en el segmento de oficinas y proyectos residenciales premium. Según un informe de Colliers, los capitales provienen principalmente de Estados Unidos, España y Canadá. Los analistas destacan que Chile se mantiene como uno de los países más seguros de la región para invertir en ladrillo, gracias a su marco legal sólido y estabilidad de largo plazo.

